Popularmente los términos hongo y seta se suelen confundir y no se emplean con corrección: en Euzkadi se les llama hongos a los boletus, es decir, a unas setas que tienen poros; al resto se les llama setas. En otros lugares hongos son los que crecen en los árboles, y los que crecen en la tierra se llaman setas. También se les suele llamar hongo o seta indistintamente cuando en realidad nos estamos refiriendo al fruto que recogemos.
En primer lugar vamos a ver cómo se forman las setas y de qué partes se compone. Lo vamos a hacer refiriéndonos a una clase de setas, los basidiomicetos, por ser ésta la que abarca las setas que presentan mayor interés, ya que entre ellas se encuentran la mayoría de las comestibles y las tóxicas.
En la parte baja del sombrero se encuentran las láminas o los tubos, según el tipo de seta de que se trate. A esta parte se le llama himenio y es la zona donde se localizan las esporas y, por tanto, la parte fértil de la seta.
Cuando las esporas maduran, se desprenden del himenio y caen al sustrato que puede ser la tierra, troncos de árboles, estiércol, etc. Si las condiciones son favorables, germina.
Una de las extremidades de la espora se desgarra en forma de pequeña abertura por la que van saliendo unos hilos finísimos y largos que se llaman filamentos primarios, que al entrar en contacto con otro filamento producido por otra espora de signo sexual contrario, forman unos nuevos filamentos más gruesos llamados filamentos secundarios y son los únicos que pueden dar lugar al nacimiento de las setas. Estos filamentos mencionados se llaman hifas y al conjunto de hifas se le denomina micelio.
Este micelio se extiende por todo el sustrato y, a veces, lo hace en forma circular formando los llamados corros de brujas que en algunas especies se hacen notar por el cambio de color de la hierba que está encima de él. Otras veces se desplaza en línea y llega a alcanzar decenas de metros por lo que constituye, junto a algunos corales, el ser vivo más largo que existe.
Por lo general este micelio tiene forma de red y cunado las condiciones de tiempo, época y terreno son favorables, de los nudos de esa red salen unos abultamientos llamados primordios que dan lugar al huevo en cuya parte interna se marcan las formas del pie, bulbo, láminas, etc. Todo esto se produce bajo tierra y cuando las fuerzas internas del huevo son superiores a la oposición del terreno, la cáscara se rompe y aflora la seta.
Las setas carnosas son las más abundantes y su vida es muy corta. Pueden durar una semana, que es el tiempo necesario para que las esporas maduren, mientras que el micelio puede durar muchos años. Al desprenderse al sustrato las esporas maduras, vuelven a germinar y así se repite el ciclo de la vida del hongo.
Una vez sabido qué es el micelio, ya estamos en disposición de distinguir entre el hongo y la seta. El hongo hace referencia al total de la planta (el micelio y su fruto), mientras que la seta es, ni más que menos, el aparato reproductor del hongo; es la parte visible de la planta y lo que se puede consumir de esta. La seta es solo el cuerpo fructífero de algunos hongos superiores. Podríamos decir que la seta es al hongo lo que la manzana es al manzano.